Tras la recién celebrada IX Cumbre de las Américas queda la expectativa de cómo serán puestos en práctica los pasos marcados en la «hoja de ruta» para canalizar la migración en la región y que se dio a conocer con el nombre de Declaración de Los Ángeles.
El documento, firmado por más de una veintena de países, no cuenta sin embargo con las rúbricas de Cuba, Nicaragua o Venezuela, tres de los países no asistentes a la cumbre puesto que no fueron invitados por el gobierno de Estados Unidos, país anfitrión del evento hemisférico. No obstante, los acuerdos alcanzados en la cumbre, que apuestan por una migración segura, ordenada y regular, sí impactan a las naciones no invitadas, en parte por ser tres de las grandes emisoras de migrantes y refugiados de la región.
Su visible ausencia en la foto de familia no impidió, sin embargo, que en el Centro de Convenciones de los Ángeles se hablara de Nicolás Maduro, Daniel Ortega y Miguel Díaz-Canel.
Empezando por Cuba, pues la nueva apuesta migratoria de la administración de Joe Biden beneficiaría, entre otros, a algunos de los habitantes de la isla.
“Estamos construyendo caminos legales. El programa de reunificación familiar haitiano que anunciamos alrededor de la cumbre. El programa de reunificación familiar cubano. Estamos ampliando los programas de trabajadores temporales. Estamos construyendo caminos seguros y ordenados. No tomen el camino de viaje solo para regresar”, aseguró el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en entrevista con la Voz de América durante la Cumbre de las Américas.
Mientras tanto, con una de cada cinco personas que han huido del país, el tema de Venezuela y su crisis de migrantes y refugiados tampoco escaparon de la cumbre hemisférica, a pesar de la ausencia de Nicolás Maduro. Un asunto que sigue siendo prioridad para la ONU.
En entrevista con la Voz de América, Filippo Grandi, el Alto Comisionado para los Refugiados de las Naciones Unidas, aseguró que “tenemos diálogo con todos los países, en particular, en este contexto con el gobierno de Venezuela. Hablé hace unos días con el vicepresidente de Venezuela (…) También estamos trabajando dentro de Venezuela, para los desplazados. Entonces queremos mantener esa cooperación y continuaremos teniendo este diálogo. Si están aquí o no, para nosotros no es importante”.
Por su parte, el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, quien también conversó con la VOA, invitó a Daniel Ortega, otro de los ausentes en la cumbre, a dialogar sobre la situación de los denominados presos políticos nicaragüenses. Sin embargo, el mandatario costarricense, quien aún no ha enviado embajador a Nicaragua, aseguró que el fortalecimiento de las relaciones entre Ortega y su aliado ruso, Vladimir Putin, estaría dificultando la senda del acercamiento.
“Yo creo que el diálogo tiene que ocurrir. Sin embargo, en estos momentos nosotros tenemos preocupaciones serias con Nicaragua (…) Daniel ortega invitó al ejército ruso a enviar tropas y equipo a Nicaragua, nosotros no tenemos ejército desde el año 1949. Imagínese cómo nos sentimos, preocupados y con mucha razón”, dijo Chaves a este medio.
No en vano, a petición del presidente nicaragüense, la Asamblea Nacional de Nicaragua, bajo el dominio de los sandinistas, autorizó hace unos días el ingreso al país de tropas, naves y aeronaves de las Fuerzas Armadas de Rusia del 1 de julio al 31 de diciembre.
Voz de América