Nicholas John Roske, de 29 años, de Simi Valley, California, se declaró culpable hoy de intentar matar a un juez de la Corte Suprema de Estados Unidos.
«Este atentado calculado contra la vida de un juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos fue un ataque atroz contra la Corte misma», dijo la procuradora general Pamela Bondi. «Cualquiera que piense que puede usar la violencia o la intimidación para influir en nuestros tribunales será recibido con todo el peso de la ley y se enfrentará a cadena perpetua».
«Nicholas Roske buscó cometer un ataque despreciable y premeditado contra un juez de la Corte Suprema y hoy es otro paso hacia la rendición de cuentas», dijo el director del FBI, Kash Patel. «No se pueden tolerar ataques violentos, ya sea que los objetivos sean funcionarios públicos o ciudadanos privados, y el FBI y nuestros socios investigarán agresivamente y llevarán ante la justicia a todos aquellos que participen en tales complots».
«El intento de asesinato de un juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos es un acto extremo y descarado, uno que nosotros, junto con nuestros socios federales, locales y estatales encargados de hacer cumplir la ley, no toleraremos», dijo la fiscal federal Kelly O. Hayes para el Distrito de Maryland. «Es a través de estas asociaciones que podemos responsabilizar a los delincuentes y defender el estado de derecho. Estamos comprometidos a perseguir y enjuiciar implacablemente a aquellos que están involucrados en la planificación y ejecución de actos de violencia contra otros».
Como parte de su declaración de culpabilidad, Roske admitió que el 7 de junio de 2022 voló del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles al Aeropuerto Internacional de Dulles con un arma de fuego y municiones en su equipaje facturado. Luego tomó un taxi desde el aeropuerto hasta el condado de Montgomery, Maryland, con la intención de matar al juez de la Corte Suprema.
Según la denuncia penal y las alegaciones fácticas del Gobierno, el 8 de junio de 2022, aproximadamente a la 1:05 a.m., dos alguaciles federales adjuntos, que protegían la residencia de un juez de la Corte Suprema, observaron a Roske entrar y salir de un taxi frente a la residencia. Roske vestía ropa negra y tenía una mochila y una maleta. Al observar a Roske, los dos alguaciles federales adjuntos comenzaron a salir de sus vehículos mientras el acusado procedía a caminar por la calle.
Poco después, Roske le dijo a una persona del Centro de Comunicaciones de Emergencia del Condado de Montgomery que tenía pensamientos homicidas y suicidas, que tenía un arma en su maleta y que voló desde California para matar a un juez de la Corte Suprema en particular.
Los oficiales del Departamento de Policía del Condado de Montgomery respondieron al lugar y detuvieron a Roske. Un registro de la maleta y la mochila de Roske reveló un arma de fuego; aparejo de pecho táctico negro y cuchillo táctico; dos cargadores, cada uno con 10 cartuchos de munición; 17 cartuchos adicionales de munición; gas pimienta; bridas; un martillo; Destornilladores; un punzón de clavos; una palanca; una pistola ligera; cinta adhesiva; botas de montaña con acolchado en la parte exterior de las suelas; y herramientas para abrir cerraduras, junto con otros artículos.
La policía transportó a Roske a una estación del Departamento de Policía del Condado de Montgomery, donde se le leyeron sus derechos Miranda. Roske declaró entonces que estaba molesto por un borrador de decisión de la Corte Suprema sobre el aborto que se filtró recientemente, así como por el reciente tiroteo en la escuela de Uvalde, Texas. El acusado también admitió que vino de California con la intención de usar el arma de fuego y las herramientas de robo y matar al juez de la Corte Suprema.
Roske enfrenta una sentencia máxima de cadena perpetua. La jueza federal de distrito Deborah L. Boardman programó la sentencia para el 3 de octubre. Un juez de un tribunal federal de distrito determinará cualquier sentencia después de considerar las Pautas de Sentencia de EE. UU. y otros factores legales.