El gobierno de Estados Unidos aseguró este miércoles que Kilmar Ábrego García, un salvadoreño deportado pese a tener protección migratoria, tenía antecedentes de violencia doméstica y supuestos vínculos con la pandilla MS-13.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) publicó documentos que detallan una orden de restricción solicitada por la esposa de Ábrego, quien lo acusó de haberla golpeado, arañado y desgarrado la camisa durante un episodio de violencia. “Este miembro de la pandilla MS-13 no es una figura simpática”, afirmó la agencia en un comunicado.
Kilmar Abrego Garcia had a history of violence and was not the upstanding “Maryland Man” the media has portrayed him as.
According to court filings, Garcia’s wife sought a domestic violence restraining order against him, claiming he punched, scratched, and ripped off her shirt,… pic.twitter.com/FpSV0k3i90
— Homeland Security (@DHSgov) April 16, 2025
Ábrego García, de 29 años, fue detenido el pasado 12 de marzo en un estacionamiento cercano a su residencia en Maryland, cuando se encontraba con su hijo de cinco años. Una jueza federal calificó su arresto como “ilegal” al considerar que violaba su estatus migratorio protegido.
El gobierno estadounidense deportó a Ábrego el 15 de marzo a El Salvador, donde fue internado en el Centro de Confinamiento para Terroristas (Cecot), una prisión de máxima seguridad inaugurada por el presidente Nayib Bukele.
Tras la polémica, las autoridades estadounidenses reconocieron que la deportación fue resultado de un “error administrativo”, pero aclararon que el salvadoreño se encuentra bajo custodia de las autoridades salvadoreñas y que su repatriación inmediata no está garantizada.