Los mercados financieros internacionales están atravesando uno de sus momentos más turbulentos en años, a raíz de la creciente tensión comercial provocada por los nuevos aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Así lo señala el Informe sobre la Estabilidad Financiera Mundial del FMI, que sitúa estos aranceles como uno de los principales riesgos geopolíticos del año, junto con guerras, sanciones y crisis diplomáticas.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advierte que estos eventos pueden generar un efecto contagio que afecte tanto a economías emergentes como a países desarrollados, agravando la volatilidad de los mercados y debilitando la confianza de los inversores.
Wall Street en caída: el S&P 500 pierde más de un 12%
Después de dos años de subidas históricas, el mercado estadounidense ha entrado en una fase de corrección. El índice S&P 500 acumula una caída del 12,3 % en lo que va de 2025, una fuerte reversión tras las ganancias superiores al 20 % en 2023 y 2024. La situación es aún más crítica para el Nasdaq, que se ha desplomado casi un 18 %, reflejando la desconfianza en el sector tecnológico.
Los analistas señalan que los mercados han reaccionado con inquietud a la nueva política comercial de la Casa Blanca, que ha introducido aranceles a varios productos estratégicos, lo que ha disparado los temores de una recesión global.
Los bonos del Tesoro ya no son un refugio seguro
Tradicionalmente vistos como un refugio en tiempos de turbulencia, los bonos del Tesoro estadounidense están mostrando una volatilidad inusual. El rendimiento del bono a 10 años, clave para fijar tasas hipotecarias y de crédito, alcanzó el 4,80 % en enero, cayó brevemente, y luego volvió a repuntar tras los anuncios arancelarios de Trump en abril.
Lo preocupante, señalan expertos, es que bonos y acciones están cayendo al mismo tiempo, una situación poco habitual que refleja una creciente desconfianza hacia la economía estadounidense como destino seguro para las inversiones.
Solo el oro brilla en medio del caos
En medio de esta tormenta financiera, el oro ha reafirmado su posición como activo refugio por excelencia. Su precio ha roto récord tras récord en los últimos meses, reflejando el movimiento de capital hacia activos más estables frente a la creciente incertidumbre.
FMI advierte de un posible contagio financiero global
El FMI no solo pone el foco en EE. UU., sino que alerta de los efectos secundarios de la política arancelaria sobre países con fuertes lazos comerciales con Washington. “Los vínculos financieros y comerciales pueden amplificar los efectos de estas tensiones, extendiendo el impacto a soberanos y empresas extranjeras”, señala el informe.
Aunque los mercados aún no han entrado en pánico, el clima general es de inestabilidad y cautela, y muchos analistas no descartan una corrección más severa si las tensiones comerciales no se resuelven pronto.