La comunidad venezolana en el exilio expresó su creciente preocupación ante los recientes acontecimientos que podrían afectar de manera directa su estatus migratorio en Estados Unidos. Esto luego de que la Corte Suprema dictaminara que la administración federal podría revocar el Estatus de Protección Temporal (TPS) a unos 350 mil venezolanos, sumado a informes sobre posibles cambios que dificultarían aún más la solicitud de asilo político.
Te puede interesar: Casa Blanca aclara alcance de prohibición de viajes: venezolanos con visas vigentes no serán afectados
Durante una conferencia de prensa, representantes de diversas organizaciones manifestaron su alarma ante una posible nueva regulación que impediría a los solicitantes de asilo obtener permisos de trabajo, una medida que, de concretarse, alteraría drásticamente las condiciones de vida de miles de migrantes.
La información fue compartida por Telemundo 51.
Helene Villalonga, presidenta de la Asociación Multicultural de Activistas Voz y Expresión (AMAVEX), advirtió que la situación es cada vez más crítica:
“La injusticia que están haciendo con la comunidad venezolana se está yendo de las manos. Nuestra situación aquí es grave, crítica”.
El empresario venezolano Javier Alejandro Latouche, quien actualmente cuenta con TPS y tiene un año solicitando asilo, expresó su temor ante la posible pérdida del permiso laboral:
“Nos preocupa que nos vayan a quitar el permiso de trabajo porque compramos casa, tenemos empresa, pagamos seguros. Me tocaría vender todo y buscar hacia dónde ir, que no tengo, porque tengo un pasaporte anulado”.
El Departamento de Seguridad Nacional, consultado sobre este posible cambio en la política migratoria, respondió a través de un comunicado que:
“El Departamento está estudiando todas las opciones posibles para proteger nuestra seguridad nacional y aumentar la integridad de los programas. No comentamos en el proceso deliberativo o la posible toma de decisiones”.
José Antonio Colina, presidente de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex), destacó el impacto económico y social que una medida de este tipo podría tener:
“¿Quién puede vivir en esta ciudad o en cualquier lugar de EE.UU. sin permiso de trabajo, o en estados como Florida, donde la licencia de conducir depende del permiso laboral?”.
Aunque el senador Marco Rubio afirmó recientemente que los venezolanos que pierdan el TPS podrían optar por solicitar asilo político, Villalonga recordó que no todos califican para esta figura legal:
“Para calificar necesitas tener méritos. Pero más allá de ello, la triste realidad es tener ahora que intentar otra demanda, posiblemente por la terminación de la autorización legal de trabajo”.
La incertidumbre crece entre los venezolanos radicados en Estados Unidos, quienes temen perder la estabilidad construida durante años, en medio de una posible reconfiguración de la política migratoria bajo una futura administración Trump.