evtv
Deportes

Un verano convertido en ensayo general de los Juegos de París-2024

Maniobras de barcos para preparar la ceremonia de apertura, primeros largos en el Sena y arqueros en la plaza de los Inválidos… A un año de los Juegos de París-2024 el verano que comienza en la capital francesa será un ensayo general de la cita olímpica.

Tradicionalmente, cada ciudad que recibe los Juegos prueba sus nuevas sedes un año antes para hacerlo con similares condiciones meteorológicas.

«El verano de 2023 estará bien cargado», resumió a principios de junio Pierre-Olivier Beckers, miembro del Comité Olímpico Internacional (COI), de visita en París para reunirse con la organización. Las pruebas serán «enseñanzas» y servirán para «hacer ajustes y abordar los Juegos con total serenidad».

Primer test: Una prueba internacional de vela en Marsella, del 9 al 16 de julio, para probar la sede, el viento y la seguridad.

 

– Natación en el Sena –

 

A principios de agosto, París tomará el relevo: Los primeros nadadores de aguas libres se lanzarán al Sena para una prueba de la Copa del Mundo de natación maratón, desde el Puente Alexandre III.

Serán de los primeros en probar el agua del emblemático río, que estará abierto al baño en 20 puntos de la región parisina tras los Juegos.

A principios de junio, el ayuntamiento de París aseguró que la calidad del agua era «excelente», dando el visto bueno a las pruebas de natación en aguas libres, que estarán seguidas de una competición de triatlón y otra de paratriatlón, a mediados de agosto.

Estas pruebas también servirán para calibrar el calor en la capital francesa, que cada vez sufre más a menudo olas de altas temperaturas -este junio fue el más caluroso desde el comienzo de la medición a finales del siglo XIX-.

Además la Agencia Francesa de Lucha contra el Dopaje (AFLD), encargada por el comité de organización del programa operacional, afinará su logística.

Otra prueba importante, también en el Sena pero a mediados de julio, será la ceremonia de inauguración, el gran rompecabezas para la organización. En este caso no habrá un ensayo, solo maniobras de barcos similares a las que tendrán que hacer el 26 de julio de 2024.

 

– Secreto bien guardado –

 

Ese día el comité de organización solo dispondrá de «un tiro» para que todo salga bien en un espectáculo firmado por Thomas Jolly, cuyas líneas generales circulan únicamente entre algunas personas que deben guardar el secreto.

En todo caso, el desafío de mover más de 115 barcos con los deportistas en seis kilómetros entre el puente de Austerlitz y el puente de Iena es mayúsculo, sobre todo en términos de seguridad.

El impacto televisivo será planetario con 1.000 millones de espectadores. Para concretar sus planes de rodaje, la empresa OBS (Olympic Broadcasting Services) recibió la autorización a mediados de junio para utilizar aviones y helicópteros varias horas al día por encima de las sedes olímpicas pero también de monumentos como el Sacré Coeur o Notre-Dame.

En las sedes se tendrán que probar las configuraciones, como por ejemplo en Roland Garros, que en los Juegos albergará el tenis pero también el boxeo. El Parque de Exposiciones de París recibirá al balonmano y el tenis de mesa, mientras que el Grand Palais probará su polivalencia con el esgrima y el taekwondo.

En Concorde se darán cita los deportes urbanos, así como la ceremonia de apertura de los Paralímpicos a finales de agosto de 2024. Este verano se realizará «un test operacional».

Para el Mundial de rugby 2023, por toda Francia del 8 de septiembre al 28 de octubre, Concorde se convertirá en una ‘Village’ para recibir a los aficionados.

Los pocas instalaciones construidas para los Juegos, como el Centro Acuático Olímpico (CAO) en Saint-Denis o el Arena La Chapelle, se probarán en 2024, cuando estén terminados.

AFP