Rescatistas de Japón siguen labores de búsqueda con la esperaban de conseguir supervivientes entre los escombros. El potente sismo que provocó derrumbes de tierra en el norte de Japón ya tiene como saldo a 35 fallecidos, la mayoría de la pequeña localidad rural de Atsuma.
El terremoto de magnitud 6,6 ha puesto ha trabajar incansablemente a 40.000 rescatistas con excavadoras , perros y 75 helicópteros. Amenos 600 habitantes de esa pequeña localidad sufrieron daños leves, según el gobierno local de la isla de Hokkaido.
Shinzo Abe, primer ministro japonés, dijo que la electricidad estaba restaurada casi por completo en la isla, luego que tres millones de hogares se quedaron sin corriente cuando el sismo del jueves dañó una planta térmica que proporciona energía a la región. «El número de hogares sin electricidad se redujo a 20.000», dijo Abe en una reunión de su gabinete.
Aún hay 31.000 hogares que no tienen agua y unas 16.000 personas están evacuadas en albergues. El sismo también derribó varias casas y muros en Sapporo, la principal ciudad de la región, aunque la mayoría de las víctimas se registraron en el corrimiento de tierra de Atsuma.
Los vuelos internacionales se reanudaron en el principal aeropuerto de Sapporo este sábado, un día después de que los trenes de alta velocidad volvieran a funcionar.