Autoridades regionales del departamento colombiano de Arauca, fronterizo con Venezuela, denunciaron este domingo combates en varios municipios entre disidencias de las FARC y guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que dejan al parecer 17 muertos.
«Pude tener comunicación (…) con el gobernador y la información que tiene el Gobierno departamental habla de 17 personas asesinadas», dijo a Noticias Caracol el alcalde de Arauquita, Etelivar Torres.
El funcionario explicó que ha recibido información de la comunidad sobre muertos por combates en varios lugares del departamento pero que son «informaciones que no podemos decir que sean oficiales porque no han sido constatadas por ningún organismo».
Al respecto, la Defensoría del Pueblo dijo que según información recopilada por su oficina regional, en las «últimas horas se han presentado homicidios, amenazas, retenciones ilegales, desplazamientos masivos y riesgo de desplazamiento forzado en municipios de frontera, específicamente en Tame, Fortul, Saravena y Arauquita».
Igualmente, expresó su «profunda preocupación por la agudización del conflicto armado» en Arauca, departamento petrolero en el que hay fuerte presencia del ELN, disidencias de las FARC y bandas de narcotraficantes se disputan el control territorial.
Entre tanto la Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU para los DD.HH. llamó a proteger a la población civil y a activar los planes de contingencia para estos casos.
«Hacemos un llamado a asegurar el respeto al DIH y a los DDHH, en particular a la protección de la población civil; a activar los planes de contingencia necesarios y medidas que permitan cumplir las recomendaciones de las alertas tempranas de la Defensoría del Pueblo», señaló el organismo internacional.
En ese mismo sentido se manifestó la Misión de Apoyo al Proceso de Paz (MAPP/OEA) de la Organización de Estados Americanos (OEA).
«Rechazamos enérgicamente enfrentamientos entre grupos armados ilegales en Arauquita, Fortul, Saravena y Tame. Instamos a estos grupos a respetar el DIH, poner en práctica los mínimos humanitarios y dejar la población civil por fuera del conflicto armado».