El Departamento de Justicia estadounidense pidió este martes la autorización de un tribunal del Distrito Sur de Florida para confiscar un avión usado por el dictador Nicolás Maduro y su régimen que violó las sanciones impuestas por EE.UU.
La aeronave Dassault Falcon 900 EX que, fue incautada el año pasado en República Dominicana a petición de EE.UU., según el Departamento de Justicia, fue contrabandeada desde EE.UU. bajo falsos pretextos y operado en beneficio de Maduro.
Según la denuncia, el avión es confiscable en base a violaciones de la ley estadounidense, incluida la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) y violaciones de lavado de dinero.
En la demanda señaló que el 23 de enero de 2023 o alrededor de esa fecha, una empresa supuestamente con sede en San Vicente y las Granadinas (Compañía Extranjera 1) celebró un contrato para comprar el avión Dassault Falcon 900 EX a una empresa de Florida por 13.250.000 dólares.
También dijo que la persona encargada de comprar la aeronave supuestamente en nombre de la Compañía Extranjera 1 era un ciudadano venezolano (Foreign Principal 1), quien ocultó el hecho de que representaba o estaba asociado con el régimen de Maduro y apuntó, además, que la Compañía Extranjera 1 simplemente actuó como propietaria nominativa del avión ya que se formó poco antes de la compra, en junio de 2022, y fue eliminada del registro de empresas de San Vicente por falta de pago de las tarifas anuales dos años después, en mayo de 2024.
La demanda alega además que los fondos utilizados para comprar el avión Dassault Falcon 900EX se enviaron a través de múltiples transferencias bancarias desde diferentes países, incluida Malasia, utilizando tanto dólares estadounidenses como euros, y que Foreign Company 1 utilizó una dirección de correo electrónico con un dominio «.ae» de los Emiratos Árabes Unidos para comunicarse con el vendedor con sede en Florida, a pesar de que los representantes de Foreign Company 1 supuestamente tenían nombres españoles y algunos de los correos electrónicos contenían la frase «Enviado desde mi iPhone», o español para «Enviado desde mi iPhone».
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La demanda alega además que la aeronave Dassault Falcon 900 EX voló desde los Estados Unidos a San Vicente alrededor del 3 de abril de 2023, y aproximadamente cinco horas después, partió hacia Caracas, Venezuela, piloteada por dos miembros de la Guardia de Honor Presidencial Venezolana, y acompañada por una segunda aeronave que opera desde una base militar venezolana.
Asimismo, apuntó que, desde mayo de 2023, el avión Dassault Falcon 900 EX voló hacia y desde Venezuela al menos 21 veces y se vio a Maduro viajando con la aeronave en visitas oficiales a otros países, incluso para un intercambio de prisioneros con EE.UU. en diciembre de 2023.
En marzo de 2024, la aeronave Dassault Falcon 900 EX voló a la República Dominicana para su servicio y mantenimiento, donde la Compañía Extranjera 1 se presentó como la propietaria, ocultando a la empresa de mantenimiento de aviones con sede en República Dominicana que la aeronave había sido comprada y operada en beneficio del régimen de Maduro.
La demanda indica además que, en al menos dos ocasiones en mayo de 2024, Foreign Principal 1, que supuestamente actuaba en nombre de Foreign Company 1, y otras personas venezolanas, incluido personal militar, intentaron recuperar el avión Dassault Falcon de la República Dominicana.
Tras los intentos de los individuos venezolanos de recuperar la aeronave Dassault Falcon 900 EX, el Gobierno de los EE.UU. obtuvo una orden de incautación y solicitó que la República Dominicana incautara, detuviera y transfiriera la aeronave Dassault Falcon.
De conformidad con la solicitud, la aeronave fue transportada de regreso a EE.UU. el 2 de septiembre de 2024. Ese mismo día, el régimen venezolano emitió un comunicado en el que admitía que el avión Dassault Falcon «ha sido utilizado por» Maduro.
Un segundo avión Dassault Falcon identificado por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro como propiedad bloqueada de Petróleos de Venezuela, S.A. (PdVSA) también fue incautado en la República Dominicana a solicitud del Gobierno de los EE.UU. el 6 de febrero de 2025.